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Vanity Fea

De la Vega y los piratas

Hace unos días, antes del secuestro del atunero euskaldun en aguas de Somalia, publicaba Manuel Molares en Crónicas Bárbaras esta crónica—si es que una profecía puede ser una crónica, y puede, claro, cuando las cosas ya están cantadas de antemano.

Narra allí una peripecia parecida que les sucedió a unos ciudadanos franceses. La diferencia es que una vez pagado el rescate, el ejército francés atacó a los piratas, mató a unos cuantos, capturó a los demás, y hasta recuperó el dinero. Qué salvajes, estos franceses, ¿no?—emplear las armas contra los piratas y criminales.

En contraste, nuestro Ejército de la Paz les llevó el dinero a los piratas y les dejó que se marchasen tranquilamente con el botín. Con el consuelo que aparece en algún periódico de que "los piratas temían que la fragata les largase algún pepinazo" mientras se alejaban en su bote hacia la costa. Bien sabían que lo merecían, aun con criterio de pirata. Pero nuestro ejército, o su mando, es aún más benevolente y clemente con los piratas de lo que suponían éstos cuando se animaron a atacar un barco español (o lo que fuese). Ahora ya tienen más datos los piratas, para la siguiente vez.

Sin duda el gobierno aplica aquí los mismos principios que en la negociación etarra, o los que expresó en una entrevista una hija de los secuestrados: "Deseo que vuelva mi padre sano y salvo, aunque comprendo a los piratas". Todo un programa mental, vamos. Como ese otro de "ahora más que nunca es necesario negociar", cuando los terroristas le vuelan la cabeza a alguien, o el aeropuerto. Estas cosas no tienen remedio: son defectos de carácter (aún más que de ideología y estrategia política) que evidentemente nunca van a enmendar quienes así conectan ideas.

Nuestra vicepresidenta rehusa hablar del rescate (por la discreción necesaria, necesaria para contener el ridículo), y atribuye la liberación de los secuestrados a la habilidad diplomática de su gobierno. Oye, a base de euros, la diplomacia se engrasa que da gusto. ¿Querrá decir de la Vega que, aparte de untar a los piratas del barco, ha untado a algún otro pirata del gobierno somalí, si existe tal gobierno? Menuda gestión de la crisis—con el dinero público que no es de nadie, seguramente. Si en efecto ha sucedido así, esta señora vicepresidenta y sus socios son unos malversadores de fondos públicos. Aparte de llevar al ridículo al país que representan, y convertir a su ejército en el hazmerreír de las mafias y bandoleros.  Con esta pandilla vamos aviados: y lo malo es que esto es como hacerle señales de neón al amigo alahuita del sur, al que nos une una entrañable amistad. De que pase, que puede servirse—que el campo está abonado para una nueva marcha verde. Tonto será si espera. De momento, Chacón ya está reduciendo las tropas en la frontera africana en dos tercios, como quien da ideas.

Y hablo de Chacón y de la de la Vega porque Ceja-Pé está ausente en estas historias. Como siempre que conviene escurrir el bulto: pero ahí está avalando todo con un ligero movimiento de cejas. Con un sinvergüenza de este calibre como presidente, vamos aviados. Pagaremos el pato todos—incluidos los millones de indocumentados mentales que lo han votado. Para empezar, ya nos han atracado con las cifras falsas del PIB, que lo de la crisis lo sabía todo el mundo menos—oh casualidad—el ministro de Economía. No hace falta ir a buscar a los piratas a Somalia: los tenemos a la chepa, gobernándonos. Por eso los comprenden y negocian con ellos.

Otro que tal baila. Moratinos, nuestro ministro de exteriores, diciendo que bah bah, no importa pagar, que la libertad de los españoles no tiene precio. —¿Cómo que no? Vale en este caso 1.200.000 dólares. Porque ¿no querrá el ministro decir que hubiera pagado CUALQUIER CANTIDAD QUE LE HUBIESEN PEDIDO?—o sea, ¡que AÚN LE HAN PEDIDO POCO! Otro mensaje que sin duda captará algún buen entendedor.

y re- PS: Vaya, por fin aparece Z-Man un par de días después, pero (como de costumbre) para cubrirse de gloria. Negándose a contestar sobre esta cuestión "por responsabilidad". Ver el comentario de Arcadi Espada.

Terrorismo tolerado... o subvencionado


2 comentarios

JoseAngel -

Que no, marcos, que los barcos claro que tienen patria. Los marineros serán africanos y gallegos, supongo, pero donde hay patrón no manda marinero, y el barco lleva el pabellón que manda el patrón. Y al parecer el pabellón era vascongado. No quiere decirse que de ser español no le hubiesen atacado igual— sobre todo vistos los exquisitos modales (o incompetencia) de la marina española con los piratas.

marcos -

yasoy d vuelta.
q como bien sabes, los barcos, incluso los atuneros, no hablan (con la salvedad d algún velero, pero sólo a su dueño). asi q l buque no s ¿euskaldun?
si la tierra s de quien la trabaja, l barco s de quien lo vive. n sts caso 26 hombres. y d ellos, trece africanos. sáquense las conclusiones.
de los trece españoles, más sin embargo, vascongados eran cinco (euskaldunes, a saber). los otros ocho de hacia el finisterre más bien (y de los vascongados habria q estudiar cuantos mas q de la estirpe de aitor serian mas bien de breogan).
¿el dueño (dinero)? sí, ese 100% de donde sabino.
a seguir con salú. n abrazo.