En el ciber
M-aquí en Viveiro, donde me despierto y busco inmediatamente un cibercafé por consultar el correo electrónico, y ver si hay noticias, si me han mandado un mail por ejemplo diciendo que Su Caso Se Ha Revisado, o en esa línea. Pero no, mi caso está cerrado al parecer. Me compré una extensión Wifi por si existía eso aquí en el profundo Lugo, pero no lo hay, y moriremos al palo de los cibercafés. No sería tan raro, oye, el año pasado lo tenían en la biblioteca de Cedeira, unos metros más allá. Aquí "no conosco". Decía Walter Benjamin que para conocer una ciudad a fondo había que visitar sus librerías de viejo. Como en este país casi no las hay, habrá que actualizar el dicho y pasarlo a las bibliotecas y los cibercafés. Me voy ahora a explorar el resto, que después de chequear el mail hay que comprar víveres. En Viveiro sin vivir en mí.
3 comentarios
JoseAngel -
solodelibros -
Isabel -