Que no quede ahí la cosa

21 marzo 2012

Primera condena (en este siglo) a un dirigente político delincuente, prevaricador, corrupto y mafioso—de los muchos que hay en España. Porque a los delincuentes los tenemos instalados en el gobierno y succionando del sistema organizadamente. Filas enteras tendrían que ser los procesados y condenados, sobre todo del PSOE y del PP, pero también muchísimos nacionalistas. A ver si puede con ellos la justicia, que los mira con poquitas ganas. Y que, aparte de que los condenen, lleguen a pisar la cárcel, que esa es otra. Y que además no los indulten sus congéneres, que esa también es otra. Menudos precedentes lleva ya Rajoy en estas cuestiones, en las pocas semanas que lleva gobernando—como para fiarse.

¿Y el yerno del Rey, ya no digo su hija, va a ir a la cárcel teniendo ahí a Rajoy para indultarlo? No me deliren.

Hay que echar a esta gentuza