Blogia
Vanity Fea

A letter to no body

Un post en un blog es una carta al aire, dirigida a todos y a nadie. No hay certidumbre de que nadie lo vaya a leer. Bueno, yo tengo bastantes visitas, pero no me consta que ninguna lea lo que escribo. Menos cuando me ponen un comentario, que viene a ser una de cada dos mil visitas (porcentaje despreciable). O sea que hace falta fe, o voluntad de comunicarse con uno mismo, o con el aire, para escribir un post.

En cuanto a un comentario. . . en la mayoría de los blogs que veo, los autores no responden a los comentarios. Que esos sí que van en principio dirigidos no sólo a todo el mundo, sino en concreto al autor. Pero también son cartas al aire en muchos casos, por lo visto. Aunque vayan a un sitio que normalmente tiene ciertas garantías de recepción. Muchas plataformas de blogs (antes la mía, Blogia, también lo hacía, hasta que se estropeó) avisan al autor por correo electrónico de que le ha llegado un comentario. Con lo cual el comentario es quizá la comunicación más fiable que hay en todo este asunto, y aun así no suelen recibir respuesta. En todo caso de otros comentadores, más que del autor (¡y normalmente desfavorable!)

En cuanto la respuesta a un comentario, cuando la hay. . .  un tercer caso de carta convertida en avión de papel, o metida en una botella. Ya sea del autor, o de un tercer contertulio. Se responde al comentario, pero no hay garantías de que el comentador primero llegue a saber de esa respuesta. Claro, hay sistemas, suscripciones, etc., pero normalmente se requiere la memoria, delibación y paciencia de volver a pasar por el sitio a ver si te han respondido. Oh, y muchas veces sucede, hay habituales, etc. Y en los mejores blogs se montan auténticos diálogos (a veces de sordos). Pero es excepcional. Cuántas respuestas a comentarios se perderán en el vacío.

Al menos los blogueros y comentaristas nos comunicamos con nosotros mismos. Less gives a stone.

Blogs como literatura

3 comentarios

JoseAngel -

Saludos a ambos dos, Raúl y Cristina, vaya, si os acabo de dejar comentarios hoy mismo. Es cierto que los troles y sus trolas son una cosa que desanima a cualquiera, hasta hay quien desconecta los comentarios temporalmente hasta que pase la tormenta. Pero jaja, algunos tenemos tanto mono de comentarios que igual hasta agradecíamos un troll de vez en cuando (espero que no me esté escuchando ninguno).

Cristina -

Vaya, y yo que quería ser la primera en dejarte un comentario en este post... cachis. Es lo malo de dormir sobre colchones aznar, que se despierta uno demasiado tarde... :-)

Por cierto, yo intento contestar a los comentarios, sólo que a veces me se abruman las neuronas, o me da pereza... pero en general, me parece que es de agradecer.

Raúl Tristán -

Leemos. Los post y los comentarios. Yo empecé contestando todos, hasta que me di cuenta de que el insulto y la descalificación eran constantes. Entonces empecé a dar uso a "la censura" y a dar la callada por respuesta...

Un saludo, y espero conocernos en persona algún día.